Preparación:
Cortar las pechugas por la mitad, salpimentar y reservar.
Limpiar los tomates y cortar en cubitos. Partir la cebolla en juliana y el ajo en trocitos muy pequeños.
En una sartén añadir un poco de aceite de oliva, y dejar que se caliente. Añadir la cebolla y el ajo picado y sofríe todo. Una vez que la cebolla haya cristalizado, agregar el tomate y dejar que todo se cocine durante al menos unos 20 minutos a fuego lento.
Pasado ese tiempo, añadir el vino blanco, las hojas de albahaca y deja que la salsa reduzca unos 7 minutos más. Pasado ese tiempo, apaga el fuego y añadir el queso rallado.
Remover un par de veces con la cuchara hasta que el queso se derrita entre la salsa.
Poner a precalentar el horno a 180ºC.
Rellenar las pechugas con la salsa preparada y para que no se escape por los bordes el relleno, sujetar con palillos de madera.
Poner en una bandeja de horno previamente engrasada y dejar que se cocinen durante unos 20 minutos.